Las musas están en el aire (y van armadas)
A menudo me preguntan de dónde surge la inspiración para escribir y a menudo les respondo que de todo, de lo menos esperado. Este es un buen ejemplo de inspiración automática no solicitada y un poco preocupante también.
«Una pistola, cuatro balas y una bolsa de sal». Caminar por Buenos Aires escuchando frases sueltas de conversaciones es toda la inspiración que necesitas para escribir tu novela negra. |
Si, y muy loca!! jajaja Abrazos
ResponderBorrarCecy :)